El crecimiento del transporte aéreo es imparable. Los envíos aéreos globales en 2021 supusieron un fuerte crecimiento interanual del 8 %. Se prevé que este auge continúe, sobre todo cuando las economías de los países del mundo recuperen paulatinamente la actividad económica y las restricciones de la pandemia desaparezcan.
Como hemos visto anteriormente, es importante diversificar los tipos de envíos. Además, comentábamos hace muy poco en nuestro e-book de tendencias del transporte y la logística global que el transporte aéreo jugará un papel fundamental en la cadena logística, cada vez más digitalizada. Los últimos datos no hacen más que confirmarlo.
Por lo tanto, queremos dar respuesta a las incógnitas que puedan surgirle a cualquier transitario en relación con las tendencias del transporte aéreo en el año 2022 y también en el largo plazo.
El crecimiento del transporte aéreo
Según el comunicado de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), se espera que las pérdidas netas de la industria sean de 11.600 millones de dólares en 2022. Esto no parece ser una muy buena noticia a simple vista. No obstante, es necesario observar el dato de 2021: 51.800 millones de dólares en pérdidas, una notable diferencia que nos dice mucho acerca del estado del transporte aéreo en la actualidad.
Asimismo, el comunicado comparte que el sector de la carga aérea crecerá un 13,2 % en 2022 respecto a los niveles de 2019.
Incertidumbre en la cadena de suministro
Existe una capacidad limitada en el transporte aéreo para gestionar el aumento actual de la demanda. Uno de los mayores retos de los aeropuertos en el corto plazo es la escasez de mano de obra, presente en el personal de manejo en tierra y en el de personal de rampa. Si esta no es capaz de atender a una demanda creciente, la recuperación podría perder velocidad.
No olvidemos que la gran demanda existente en el transporte aéreo está originada a su vez por una alta demanda del transporte marítimo en tiempos de pandemia. Sin embargo, los cuellos de botella del transporte aéreo pueden ser más fáciles de gestionar.
Es posible que comencemos a ver un regreso a cierta normalidad en el año 2023, con un 2024 que podría afianzar una recuperación a niveles de 2019 según la IATA, siempre que la situación sanitaria global lo permita y no existan imprevistos que alteren la logística global.
Retos de las transitarias en 2022
La demanda del transporte aéreo en la primera mitad de 2022 seguirá siendo elevada, lo que supondrá costes altos para las empresas transitarias. Siendo los envíos aéreos una de las mejores formas de aliviar congestiones en la cadena de suministro y cumplir con los plazos de los clientes, los costes actuales suponen un reto. Las empresas del sector deberían buscar nuevas maneras de reducir costes y tiempos operativos como, por ejemplo, la digitalización, que ha demostrado ser clave para ayudar a los transitarios en la crisis del transporte marítimo.
El mercado espera que la temporada alta en la carga aérea continúe hasta junio. Por ello, tanto transitarias como todos los agentes involucrados en un proceso de importación-exportación deben tener presente que serán altamente volátiles y quizás poco representativos respecto al largo plazo. Las empresas transitarias deberán contar con un plan coherente para hacer frente a costes cambiantes y anticiparse a la demanda de sus clientes.
Esta preparación es fundamental, ya que las tarifas de la carga aérea entre Asia y Europa y Estados Unidos han escalado hasta un 500 % respecto a los precios de principios de la pandemia debido a una escasez en la capacidad de carga y al aumento del comercio electrónico. Un dato para tener en cuenta.
La digitalización como motor de crecimiento
Las perspectivas de la carga aérea a corto y largo plazo son sólidas. Los indicadores como los niveles de inventario y la producción manufacturera son favorables y se prevé un crecimiento del 5,6 % en 2022. El comercio electrónico seguirá expandiéndose junto a la demanda de carga especializada de alto valor, como los productos sanitarios sensibles a la temperatura y las vacunas.
La digitalización logística se confirma una vez más como una necesidad para hacer frente a los retos de las empresas transitarias, como compensar los elevados precios y evitar cuellos de botella hasta la normalización de la cadena de suministro. Te invitamos a convertirte en un freight forwarder digital con nuestro software, que te permitirá realizar una cotización en segundos y simplificar cada fase del proceso de importación y exportación con el objetivo de ahorrar tiempo y dinero.
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